Una idea fundamentalista

Clarin .Sábado 12 de abril de 1997Información : EE UU : analizan implantar la pena de muerte para chicos de 14 años. Por Eva Giberti

¿Por qué reducir el límite a los 14? Si a partir de los siete años, que en otros tiempos se consideró edad de la razón, los chicos son capaces de matar a otros chicos, entonces ¿por qué no reconocer la precocidad de esta niñez actual? Sería más prudente que, a partir de los siete años, se pudiera sentenciar a niños y niñas a morir en la silla eléctrica. De este modo la sociedad podría protegerse de sus vicios, de sus maldades y sobretodo, de la compulsión a delinquir con que crecen los chicos actuales, que cada día se parecen más a los adultos. Lo cual forma parte de la política de avasallamiento que la niñez ha iniciado contra nosotros.
La pena de muerte a fines del milenio es defendida por las cabezas más lúcidas del fundamentalismo, y en homenaje a esos principios debería aplicarse a los niños, cuanto más chicos, mejor. Además, no debería ser un acto privado. Sería más eficaz instalar una silla eléctrica en un lugar público, para que las maestras jardineras pudieran llevar a los chiquitos. Claro, habría que diseñar sillas eléctricas pequeñas, tamaño pibe, porque resultaría poco serio que al chico le colgaran las piernitas y no le llegaran al suelo en el momento de recibir la descarga.
El gobernador de California se erigió en guardián del milenio que despunta; eligió defenderlo ejecutando adolescentes. Como sabemos que no está solo en el deseo de muerte destinado a los más chicos, es que esta mañana, intentando demoler su proyecto, el mundo de la vida se ha puesto a gritar.

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